Adam Ondra encadenó en 2018 el primer 9a+ al flash de la historia de la escalada deportiva. Escalar una vía en el primer intento o nada.
“Siempre he estado obsesionado con escalar una vía en el primer intento. Ya de pequeño quería siempre encadenar al flash todas las vías que probaba. Si no lo conseguía a la primera, ya ni tan siquiera me atraía el intentarlo una segunda vez”.
Con la vía Supercrackinette, en Saint Léger (Francia), el genio checo sorprendió a todos una vez más consiguiendo algo histórico: la escalada de una de las paredes más difíciles del mundo en el primer intento, sin caídas. Un objetivo que parecía imposible.
Ondra había realizado varios intentos anteriormente en vías legendarias como Selecció Anal o Bibliographie. Esta última cuenta con una primera ascensión de Chris Sharma, quien empleó 4 años en esa escalada y al que el simple hecho de que alguien considerase encadenarla en el primer intento le parecía asombroso. Nada raro, pues lo normal en escalada deportiva es que la gente pase días, meses, incluso años, practicando los movimientos una y otra vez hasta que se interiorizan como una coreografía de baile. Pero cuando te enfrentas a una vía al flash no hay ensayo alguno. Sales ahí a escalar tratando de resolverlo todo sobre la marcha. Lo que da una idea de la magnitud de este logro deportivo.
“Para mí, intentar encadenar una vía en el primer intento, es posiblemente la forma de escalar más intensa, la de mayor exigencia mental. Todas las decisiones han de ser tomadas en base a tu intuición”.
Este vídeo refleja todo lo que hay más allá de esa intuición de la que habla Adam Ondra.
