“Fall Line” supuso la carta de presentación del esquí extremo en Norteamérica. Este documental fue filmado en 1978 en unas condiciones muy complicadas bajo la óptica de la época en la que ahora vivimos. Antes de este proyecto, existía poca documentación sobre la disciplina también conocida como esquí extremo. Los escaladores-cineastas, Bob Carmichael y Greg Lowe se propusieron capturar la esencia de lo que necesitó Steve Shea para ascender y esquiar el Grand Teton en Wyoming. Filmado durante varias semanas en el verano de 1978, con material adicional de 1979, “Fall Line” fue nominada al Oscar al mejor cortometraje en 1981.