Las revoluciones son puntos de inflexión en la vida de las personas o en el conjunto de la sociedad. A partir de ellas, ya nada vuelve a ser lo mismo. Una revolución siempre supone cambiar las reglas que hasta entonces definían nuestra forma de entender algo. Sin grandes personajes que un día se atrevieron a vulnerar estas normas, el mundo no sería igual.
En la mente de todos, los gritos de Adam Ondra al encadenar Silence, el 3 de septiembre de 2017, en la cueva de Hanshelleren, en Flatanger (Noruega), precisamente el majestuoso escenario de B.I.G., el nuevo 9c que Jakob Schubert proponía al mundo el pasado 20 de septiembre. Lo que sí es nuevo y, a nuestro juicio, una revolución comunicativa, fue la posibilidad de seguir el encadenamiento en directo, en streaming como se dice ahora, en el canal de Youtube del propio Schubert. Algo tan novedoso en un proyecto de tal envergadura no se había visto hasta ahora. ¿Será esto un cambio de paradigma? ¿Veremos este tipo de emisiones para otros proyectos en el futuro? Es muy probable. Esos gritos de Jakob justo en el momento de poner la cadena podrían estar dirigidos al mundo para decirles que una nueva forma de comunicación es posible. Ya no es sólo anunciar en las propias redes sociales, como Instagram, quizás la más utilizada por los escaladores, la consecución de un proyecto, el logro del objetivo soñado, sino emitir en directo todo el proceso, porque no solamente se puede ver en este canal el pegue final, el que entra en la historia, sino incluso cinco intentos anteriores.