“Antes de empezar mis principales preocupaciones eran 3 tramos: la travesía de Store Vengeting a Vestgjellet, una ruta que en verano es como un sendero aéreo y que en invierno se convierte en una rampa inclinada de nieve con gran exposición; la segunda preocupación era cuánta nieve iba a haber para subir Kvandalstind; y la tercera cuán afectado por el sol estaría el descenso de Store Trolltind, un sistema de couloirs orientado al sur. Sin embargo, nada más empezar surgió otra preocupación inquientante: el fuerte viento”.
Tras varios intentos en los últimos años, Kilian Jornet logró el pasado 6 de abril unir las 7 cimas de Romsdal de una tacada. 76.5km y 9.257m de desnivel en 21 horas y 28 minutos. Una gesta sorprendente al alcance únicamente de los elegidos. Viento, hielo, roca, nieve dura, aristas aéreas, terreno expuesto, frío, riesgo de avalanchas, secciones técnicas, desafiantes corredores, rápeles… Un reto mayúsculo en el que equilibrar resistencia física, habilidad técnica y conocimiento de un medio de alto riesgo bajo condiciones sumamente cambiantes y exigentes.
“La ruta implica un reto de resistencia, algo de escalada técnica, especialmente en condiciones invernales, y una alta evaluación de riesgos y condiciones. Creo que la carga de conocimiento de la actividad es mayor o al menos igual que la carga metabólica”.
