26 Mar Alexander Megos. Buscando el límite.
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ace unas semanas, con motivo del IMS–International Mountain Summit, coincidíamos con Alex Megos en el lugar donde es capaz de expresarse con mayor naturalidad y solvencia: la roca. Éramos un grupo de unas 20 personas que en un autobús de la organización nos desplazábamos a una conocida zona con vías de hasta séptimo grado. Alex era uno más de los escaladores que a pie de vía se preparaban para disfrutar de un gran día soleado a no más de cuarenta minutos de la localidad de Brixen en el Südtirol. Allí le propusimos charlar en las siguientes semanas sobre su forma de entender un deporte en el que está escribiendo líneas muy bellas que pasarán a la historia.
Texto: Kissthemountain.
Kissthemountain: Hola Alex. Es inevitable que en esta conversación salgan los nombres de Adam Ondra y Chris Sharma. Así que prefiero comenzar por aquí. En los últimos meses hemos mantenido charlas con ambos. De ellas, hemos percibido dos estilos muy diferentes a la hora de entender la escalada. Aunque hay muchísimos matices, a Adam Ondra le percibimos como un escalador de método donde el entrenamiento y los aspectos técnicos son clave para su éxito. En la escalada de Chris Sharma, creemos que prima más la intuición. Adam nos contaba que una de las claves para haber logrado el primer 9c en Silence fue el trabajo con fisioterapeutas y expertos en el análisis de los movimientos. Nos decía, por ejemplo, que la posición de los hombros es extremadamente importante. “Si no los colocas bien, usas mucho más bíceps y pectorales, y esto puede no ser tan eficiente. En cambio, si la posición es la adecuada compensarás con la espalda entera cuyos músculos tienen más fuerza. Para la mayoría de los escaladores es muy habitual y casi instintivo seguir hábitos que pueden no ser los más apropiados”. ¿Qué importancia das tú a esta faceta de este deporte llevado al máximo nivel?
Alex Megos: Creo que tener conciencia de cómo uno escala es muy importante en el proceso de encontrar debilidades y mejorar la técnica y el estilo. Muy a menudo, la percepción de cómo uno escala difiere de la realidad. Por ponerte un ejemplo, te diría que la mayoría de los escaladores piensan que cuando escalan, progresan mucho más rápido de lo que en realidad lo hacen. Ver un video de sí mismos les hace darse cuenta de que realmente escalan de una manera más lenta a la que creían. Ser consciente de esto puede cambiar su estilo, y no hablo sólo de la velocidad, sino también del movimiento. No estoy diciendo que deberíamos grabarnos en vídeo constantemente para analizar y corregir nuestra forma de escalar, pero creo firmemente que hacerlo de vez en cuando o dejar que algún experto estudie nuestra forma de progresar ayuda a hacer un buen análisis.
K: Ahora te menciono unas palabras de Chris Sharma: “La escalada es una forma de vivir. Siempre digo, en inglés, que es un «Life Journey». Todo nuestro desarrollo personal en la vida está mezclado con la escalada y viceversa. Somos diferentes en distintos momentos de la vida y eso se refleja en nuestra forma de escalar. Para mí es mucho más que un reto de hacer 9b+ o 9c. La escalada tiene que aportar mucho al mundo. Es diferente a los deportes tradicionales. Tiene un lado místico, rebelde, aventurero, bohemio y, claro, es muy interesante esa función. Siempre he visto esas vías de altas dificultad como esculturas que existen desde hace cientos o miles de años, y cuyo código de secuencia, nosotros los escaladores, desciframos”. ¿Piensas cómo nosotros que la escalada en Adam y en Chris son muy diferentes?
A: Por supuesto, creo que Adam y Chris tienen una visión diferente sobre la escalada y un enfoque muy distinto a la hora de afrontar sus proyectos. Pero esto se puede aplicar a todos los escaladores, no sólo a ellos. Cada uno de nosotros tenemos un punto de vista diferente de la escalada. Algunos difieren más, otros van en una dirección similar. Creo que tanto para Adam como para Chris escalar no es sólo un deporte, sino más bien una filosofía y una forma de vivir la vida. Es una forma de expresarse, una forma de lidiar con los altos y bajos. La escalada se refleja en el estado de ánimo tanto como el estado de ánimo lo hace en la escalada. Así es como este deporte se convierte en parte de nuestras vidas.
K: ¿En qué punto se encuentra tu forma de entender la escalada? ¿Estoy en lo cierto cuando te digo que creo que caminas por un punto medio?
A: No creo que la forma de entender la escalada de una persona esté en un punto medio entre la de otros. Cada persona recorre su propio camino. Por supuesto que puede haber algunas similitudes con uno u otro, o incluso con ambos, pero no veo válida la generalización.
K: Adam rompió una barrera psicológica muy importante al conseguir realizar el primer 9c de la historia. En aquella entrevista, nos comentaba que quizás tú podrías lograrlo. Él resaltaba que el trabajo mental es casi más importante que el técnico. Parecía exigir cierta obsesión con el proyecto para poder culminarlo con éxito. Nos decía que no todo el mundo es capaz de alcanzar esta obsesión. ¿Está la fuerza mental entre tus puntos fuertes? Hasta ahora no has sido un escalador que haya trabajado en un proyecto durante mucho tiempo. ¿Ves necesario este cambio para poder superar tus límites?
A: Estoy de acuerdo en que para poder llevar la escalada a tu límite, el aspecto mental se vuelve cada vez más importante. En algún momento, una vez que has alcanzado tus límites físicos, todavía se puede mejorar sorprendentemente a través del entrenamiento mental. Y el necesario para superar nuestras acciones puede variar mucho de una persona a otra. No puedo responderte a la pregunta de si el control mental está o no entre mis puntos fuertes. ¿Qué son las fortalezas, en cualquier caso? Las fortalezas y debilidades son percepciones muy subjetivas. Por supuesto que quiero llegar a mi límite personal y probar en qué punto se encuentra. Dicho esto, soy consciente de que tendré que invertir más tiempo en determinados proyectos en algún momento para acercarme lo más posible a lo que soy capaz de hacer.
K: Me gustaría hablar de Perfecto Mundo [9b+]. Han pasado ya unos meses desde que lo lograste. Quería que nos hablaras de sensaciones. Primero, sobre los diez segundos que siguieron a su encadene. Después, sobre las que tuviste al asimilar lo que habías logrado. ¿Puedo preguntarte también que ha supuesto para ti la consecución de esa vía? ¿Ha cambiado tu vida y tu forma de entender la escalada desde entonces?
A: En los diez segundos posteriores al encadenamiento estaba completamente ocupado en tratar de controlar el torrente de emociones que me abrumaban. ¿Después? Creo que lleva un tiempo hasta que realmente uno se da cuenta de lo que ha logrado. El día que encadené Perfecto Mundo me sentí muy satisfecho y feliz. Toda la presión, de repente, desaparece, y piensas que casi nada puede arruinar ese momento. Las semanas que siguieron estaba muy cansado y no era capaz de empujar ni mi cuerpo ni mi mente, aunque no diría que estuviera desmotivado. Fueron sensaciones muy intensas y difíciles de explicar.
Perfecto Mundo supuso para mí darme cuenta de que esta vía no era el límite de mi escalada, y que éste se encontraba aún lejos. Sin duda, me motivó a esforzarme más para ver hasta dónde puedo llegar.
“Por supuesto que quiero llegar a mi límite personal y probar en qué punto se encuentra. Dicho esto, soy consciente de que tendré que invertir más tiempo en determinados proyectos en algún momento para acercarme lo más posible a lo que soy capaz de hacer”.
K: En 2014 logras encadenar la mítica vía Acción Directa en sólo dos horas. Hace poco hablábamos con Iker Pou sobre esta vía escalada por primera vez por Wolfgang Güllich. Sin duda supuso un punto de inflexión en el mundo de la escalada. Con la excusa de Acción Directa, me gustaría conocer cómo miras al pasado y qué escaladores han supuesto para ti una fuente de inspiración.
A: Acción Directa marcó un punto de inflexión en la historia de nuestro deporte. Fue un hito en la escalada e hizo que la gente se diera cuenta de que las cosas consideradas imposibles no lo eran después de todo.
La lista de escaladores que han sido una fuente de mi motivación es muy amplia. De hecho, personalmente creo que cada escalador tiene algo inspirador, algo que admirar y de lo que se puede aprender.
K: Hablemos del futuro a medio plazo. Sé que no soy el primero en preguntare hacia dónde se dirige la escalada. ¿Crees que en cierta medida tal y como se concibe hoy ha alcanzado ya sus límites o por el contrario pinesas que aún queda mucho por conseguir? ¿Se conseguirá algún día llegar a, por ejemplo, 10b+? ¿Qué papel crees que puedes jugar tú en la historia de la escalada?¿Crees que tu motivación seguirá intacta?
“Creo que puedo mantener un alto nivel de motivación durante mucho tiempo, aunque no creo que vaya en la misma dirección durante toda mi vida. Cambiará hacia otros aspectos, tanto de la escalada como de mi propia vida. Pero este deporte siempre ocupará un lugar muy importante. La motivación no es algo estático. Cambia de dirección y de forma”.
A: Lo primero que quiero decir es que mi motivación siempre se mantendrá. Creo que puedo mantener un alto nivel de motivación durante mucho tiempo, aunque no creo que vaya en la misma dirección durante toda mi vida. Cambiará hacia otros aspectos, tanto de la escalada como de mi propia vida. Pero este deporte siempre ocupará un lugar muy importante. La motivación no es algo estático. Cambia de dirección y de forma.
Por supuesto que pienso que la escalada se desarrollará más en el futuro. No estamos al final de lo que es humanamente posible. No creo que el progreso en las graduaciones de las vías vaya a ser tan rápido como lo ha sido en los últimos 30 años. De lo contrario, estaríamos en 10b en probablemente 25 años. Y no creo que esto suceda. El progreso y el desarrollo de un deporte se ralentizan cuanto más se ha desarrollado.
Respecto a mí, no sé qué papel jugaré en la historia del deporte. Es imposible saberlo de antemano. Sólo sé que quiero empujar mi límite personal al máximo. Luego ya veremos a dónde nos lleva esto.