18 Dic Ragna Debats & Pere Aurell. Rolling Mountains.
Texto: Kissthemountain
“Llevamos mucho tiempo compitiendo en las mismas carreras y circuitos. Queríamos hacer algo diferente y que nos aportara mucho a nivel competitivo y personal, y además realizarlo en familia. Pensamos en hacer una carrera en cada uno de los continentes y a la vez conocer el mundo y mostrarlo a la gente. Tanto Ragna como yo, somos personas inquietas e inconformistas”. Estas son palabras de Pere Aurell, quien, junto a su pareja, Ragna Debats, su hija Onna y su perro Bru habrán emprendido el que probablemente sea el proyecto de sus vidas en el momento en el que estés leyendo estas líneas.
LOS MOTIVOS
El inconformismo es una condición personal y subjetiva que hace que quien lo sufre sienta que sus expectativas no se están cumpliendo. Llevado al extremo, puede llegar a ser algo negativo pues quien lo padece nunca se siente satisfecho con lo que hace o tiene. Pero también, tiene una connotación positiva, que es la de no someterse con facilidad ante una circunstancia determinada y, por tanto, nos ayuda a mejorar y a avanzar en la búsqueda de valores y prioridades de la vida en el camino de la autorrealización y del crecimiento personal. Es en esta última acepción donde se mueven Ragna Debats y Pere Aurell. Entre ambos suman varios campeonatos y copas del mundo. Sin embargo, lejos de repetir circuitos y carreras que ya conocen, se han embarcado en un proyecto, al que han llamado Rolling Mountains, que los llevará a lo largo de todo el mundo para realizar varias carreras y a la vez conocer lugares remotos y mostrarlos a la gente tratando de concienciar sobre la belleza de nuestro planeta y la importancia de cuidar de él. Además, y esto es muy importante, lo harán en familia, pues no se separarán de su hija de 5 años, Onna.
LA COMPETICIÓN
Pero no es únicamente el inconformismo lo que ha movido a Ragna y a Pere a partir el pasado 3 de diciembre camino de Katmandú para realizar un trekking de unas dos semanas y dar comienzo a un viaje que les llevará a Hong Kong para preparar y participar en la Vibram Hong Kong 100 Ultra Trail, a Sudamérica para subir al Aconcagua y realizar el ultra trail que lleva el nombre de esta increíble montaña, a Costa Rica, atravesando previamente Perú y Bolivia, para participar en la Volcano Ultramarathon, a México, donde Pere tomará la salida del Ultra Trail Cerro Rojo, a California, turno de Ragna en este continente participando en la mítica Western States, a Francia para tomar la salida de la Ourea Trail, a África, donde subirán y bajarán al Kilimanjaro en la maratón que lleva este nombre, a Chamonix, donde serán parte de la próxima edición de la UTMB, a Nueva Zelanda, para correr en la Crater Rim Ultra, y finalmente al continente de hielo para participar en la Antarctica – The Last Desert. Efectivamente, no es sólo el inconformismo pues existe también una poderosa razón que es la de la realización personal a través de un proyecto que probablemente sea el más importante de sus vidas.
EL GERMEN
“Este viaje lo siento realmente como mi proyecto en la vida. Es algo muy importante personalmente para mí. Por supuesto está la parte deportiva, pues tendrá una exigencia competitiva muy alta, pero es también fundamental el hecho de hacerlo en familia. Será la obra de mi vida, por decírtelo de alguna forma”. De esta manera concluye Ragna una charla en la que nos cuenta un proyecto que fue dibujándose poco a poco en su cabeza y que, como todo lo bueno en la vida, ha ido cambiando y evolucionando para tomar la forma perfecta, ésa en la que no podría faltar su inseparable compañero Pere Aurell. “No lo veo como una renuncia a lo que estamos habituados sino como una continuación y extensión de nuestras carreras deportivas. En los últimos años, en los que siempre hemos intentado viajar con Onna y si podíamos con Bru, nuestro perro, he sentido una respuesta muy positiva por parte de la gente. Una especie de admiración. Muchas personas nos preguntaban cómo podíamos hacerlo. Me hizo pensar en si quizás podríamos profundizar en este concepto. Surgió la idea de hacer este viaje. Pere, en ese momento, quería prepararse para bomberos, y eso lleva un proceso de un año en el que no puedes prácticamente viajar. La idea original era hacerlo yo con Onna, pero volviendo después de cada carrera. Ésta evolucionó al pensar que se podía hacer mucho más grande, pero no quería condicionar a Pere y cambiarle los planes, ya que era consciente de que eran importantes para él. No obstante, un día le sugerí hacerlo juntos, durante un año entero y sin volver a casa. Enseguida me dijo que sí. Quería hacerlo y no le importaba posponer su proyecto profesional”.
ONNA
La familia. Otro proyecto en la vida de Ragna y Pere que no querían dejar atrás. El vínculo que existe entre ambos y con su hija Onna es muy fuerte. Aquellos que han coincidido con esta familia en cualquiera de las más prestigiosas carreras a nivel mundial han podido darse cuenta con facilidad de la importancia que tiene para ellos. No obstante, viajar con una pequeña de cinco años es algo que muchos no se plantearían. Sin embargo, Ragna y Pere lo tienen claro. También Onna. Pere nos decía: “Pensamos en hacer una carrera en cada continente que tuvieran un alto nivel competitivo. No ir simplemente a pasear por el mundo. Nos mueve conocer nuevos lugares y en familia. Este es un buen momento pues Onna ahora tiene cinco años y es más fácil pues la enseñanza aún no es obligatoria. Onna es plenamente consciente. Está siempre con nosotros y casi todo el día estamos hablando del proyecto. Ella lo oye y lo comenta en el cole con sus amigas y profesora. Sabe que viajará y que sobre todo irá a Costa Rica, porque ya estuvo y tiene un buen recuerdo. Es consciente de que se moverá por todo el mundo y que podrá ver animales y pájaros, que es lo que realmente le motiva. Esperamos que no se canse y guarde un buen recuerdo. Siempre que vamos a la montaña estamos inventando cosas para jugar con ella. Le gustan mucho las flores y siempre volvemos con un ramo o con piedras. Las coge de la montaña y se las lleva a casa donde tiene su rincón de cosas. Hará lo mismo, pero por todo el mundo”.
ILUSIONES
La envergadura de este proyecto es enorme. Viajar por lugares increíbles que el planeta Tierra nos regala a la vez que vives una temporada competitiva del máximo nivel con varias pruebas del Ultra Trail World Tour y hacerlo todo en familia, viajando la mayor parte del tiempo en autocaravana o compartiendo hogar con personas de culturas tan diferentes, es algo que difícilmente podrán olvidar Ragna, Pere y Onna. Precisamente, le preguntamos tanto a Ragna como a Pere sobre aquello que a priori les hace más ilusión. Creo que de sus respuestas puede intuirse mucho de la personalidad de cada uno de ellos. Comparten la pasión común por su vida deportiva, sin embargo en Pere detectamos un mayor interés por conocer culturas mientras que en Ragna, sus aspiraciones son más paisajísticas y de entorno:
Pere Aurell: “Ir a Nepal y a África es probablemente lo que más me llama de este proyecto. Soy una persona que disfruta mucho de las montañas y de sus paisajes, pero sobre todo me atrae conocer culturas y gentes. Y es en estos lugares donde están las que más me sugieren. Quiero ver cómo viven y apoyarles en todo lo posible. Es algo que siempre he tenido en mente, pero que por circunstancias de la vida, nunca he podido hacer. Quiero ayudar y aportar mi granito de arena a las familias, y hacerle ver a Onna que no todo es fácil y que hay otras formas de vivir. Al final creo que es lo que más me aportará a nivel personal”.
Ragna Debats: “Quizás lo que más me ilusione es el continente africano, y no estoy hablando de la competición. He estado en Marruecos, pero no en la auténtica África. Seguro que encuentro una cultura muy diferente, pero sobre todo me atrae la naturaleza salvaje. También Antártida, adonde no hubiera ido si no es por este proyecto. Para mí todo consiste en descubrir el mundo y la naturaleza. Las culturas llegarán de forma automática”.
LO QUE QUEDA ATRÁS
La nostalgia es un sentimiento que se produce cuando miramos atrás y vemos lo que hemos vivido en el pasado. Supone un anhelo por aquello que hemos dejado atrás. 365 días pueden ser relativamente poco tiempo si lo comparamos con toda una vida, pero suponen un gran espacio temporal cuando pasan uno a uno. Ragna, Pere y Onna echarán de menos parte de sus rutinas. “Nunca me he ido tanto tiempo lejos de mi entorno y familia. Tengo un gran vínculo con ellos, e irme un año será para mí algo chocante. Pero sé que compensará. Ragna sí está más acostumbrada. Tiene la familia lejos y será una aventura más de las que ha hecho en su vida. También están mis montañas. Las echaré de menos. Tengo pensado despedirme de La Mola, mi lugar de entreno, en el Parc Natural de Sant Llorenç del Munt i l’Obac. Siempre que hago un viaje largo intento subir arriba a la montaña y estar con ella un rato. Seguro que lo haré la noche antes o la misma mañana. Es como un ritual para mí”, nos comentaba Pere días antes de partir. Ragna añade: “los encuentros familiares, las sesiones de fisioterapia, los fines de semana en nuestra furgoneta, las comodidades del hogar, ir al cine con Onna y Pere…”
MIEDOS
“Me inquieta la salud. Sobre todo la de Onna. Imagino que aquí sale mi instinto materno. En cuanto a la competición, será el año más duro que he hecho nunca, por eso mi preocupación se centra en no lesionarme. Serán muchísimos kilómetros, y esto tiene un gran efecto sobre el cuerpo a nivel hormonal y muscular. Es muy importante respetar mucho el cuerpo y darle tiempo a la recuperación, aunque estemos viajando, pero sin olvidar que hay que competir al máximo nivel. Es un juego importante que hay que saber gestionar muy bien”. Son lógicas estas preocupaciones. Es un viaje hacia lo desconocido. Un gran descubrimiento tanto a nivel mental como físico. Seguramente surjan contratiempos. ¿Pero alguien duda de que Pere y Ragna no están acostumbrados a enfrentarse a ellos cuando el cuerpo y la mente parecen abandonarnos en una carrera de ultra distancia?
Ragna y Pere cuentan para este proyecto además de con el apoyo de Merrell -su familia deportiva- con los de Julbo, Santanderina, Lurbel, Rab, Lowe Alpine, Garmin, GoPro, Nutritape, The Running Clinic, NKBV, Maná Lab, Rafa Flores y Kissthemountain. Además viajarán con un cámara “invisible” que captará distintos momentos que irán desde la felicidad hasta la tristeza, y del éxito a la frustración. ¡Buen viaje!
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