29 Abr Ultraferradura. Caminos eternos
Olvido.
P
érdida o cese de un recuerdo. Olvidar no es perderlo para siempre. Afortunadamente, en muchos casos, éste puede ser rescatado.
Llevo más de dos horas sin encontrarme con algún otro corredor en carrera. Lejos de sentirme intimidado, disfruto de estos senderos que se adentran cada vez más en montañas que no conocía y a las que prometo volver para recorrer sus caminos con toda la calma que merecen.
El silencio que me acompaña provoca en mí sensaciones que hacía ya tiempo que no venían a verme. Lo único que escucho es el crujir de ramas que pisan mis pies y una brisa que acaricia mi rostro y se envuelve con el sudor refrescando mi mente y provocando que no pierda la concentración.
A lo lejos veo a una anciana que transporta unos cestos cuyo contenido está oculto por unas telas. Justo en el momento en el que la alcanzo y sobrepaso, me mira. Sus ojos irradian paz y felicidad. Su sonrisa, mientras sus ojos se clavan en los míos, me hace detenerme. No me importa que me alcancen mis perseguidores. No sé por qué pero debo hablar con ella. Sus ropas y calzado parecen de otra época. Su forma de hablar también. El rostro está surcado por arrugas tan profundas que me hacen pensar que nunca he hablado con una persona de tan avanzada edad.
“¿Te cuento algo? Llevo muchísimos años sin poder recorrer estos senderos. Antes lo hacía prácticamente cada día para ir de masía en masía vendiendo un género muy especial. Por el camino siempre encontraba masoveros, peregrinos, comerciantes e incluso algún bandolero que otro. Hace mucho tiempo que dejé de existir. Sin embargo, hoy estoy aquí para veros pasar. Esto me hace feliz, pero no más que contemplar cómo estos Camins de Ferradura también han sido rescatados del olvido para volver a la vida”.
Gracias Amics de Camins de Ferradura de Llucena.
Ultraferradura es un evento que trata, ante todo, de poner en valor el patrimonio natural y cultural del territorio al que pertenece la localidad de Llucena (Castellón). Esto, que pueden parecer grandes palabras sin más, es lo primero que se desprende de la conversación que hemos mantenido con la organización de las tres carreras que componen Ultraferradura. Las primeras palabras que mencionó Mario García, director de la carrera, iban dirigidas a la labor que de forma desinteresada vienen realizando en los últimos años los Amics de Camins de Ferradura de Llucena, y que ha derivado en unos recorridos muy atractivos donde el corredor lo único que tiene que hacer es disfrutar y dejarse llevar por el entorno. De hecho, la carrera se concibió para poder sacar del olvido caminos y sendas que llevan desde la localidad de Llucena a las mismas faldas del Penyagolosa.
El mes de abril es el elegido para abrir las inscripciones de la segunda edición de Ultraferradura que se celebrará el 8 de septiembre. Han pasado ya siete meses de la primera edición y todavía se mantiene el buen sabor de boca de dos pruebas, UF65 y TF33, que contaron entre sus participantes con nombres como los de sus ganadores, Luis Aparicio y Nerea García por un lado, y Cristian Callau y Margarita Paucar por otro; o los de Víctor Bernad, Ezequiel Cuesta o Minerva Carceller, entre otros grandes corredores de montaña.
Tanto la prueba de 65K como la de 33K discurren por zonas paisajísticas muy atractivas recorriendo antiguas masías de grandísima belleza. Las vistas al mar y a las distintas comarcas del interior de la provincia de Castellón acompañan a todos los participantes en una prueba que combina subidas con grandes desniveles, zonas técnicas y pistas donde es posible alcanzar grandes ritmos de carrera.
Tramos de la Ruta dels Molins d’Aigua, la bajada de les Fleixes con sus espectaculares vistas de las hoces del río y de la localidad de Llucena, la dura subida a la Lloma Saltadora desde donde poder contemplar el Penyagolosa o incluso el mar, la espectacular visión panorámica desde el Mas de la Costa, o los kilómetros finales corriendo junto al río, esperan a aquellos corredores que se acerquen a participar en una de las pruebas revelación de la temporada pasada.
La próxima edición también celebrará una prueba de 16 kilómetros que permitirá a aquellos corredores que se inician en este deporte o a los que prefieren las distancias más explosivas conocer las bellas montañas que rodean Llucena
Sin lugar a dudas, Ultraferradura no dejará indiferente a nadie. Tanto la organización como los muchísimos voluntarios esperan ayudar a convertir los sueños de muchos en una deseada realidad. Salut i Muntanya.
Análisis técnico por sectores.
Por Mario García. Director de Carrera
SECTOR 1. Salida – Mas de Miralles (Km. 8,4).
Distancia: 8,4 kilómetros
Salida desde la Plaza de España de Llucena. La prueba comienza con 800 metros por las calles de este bello pueblo donde la carrera se estira para evitar embudos. Enseguida los corredores encontrarán una bajada pronunciada, cómoda y rápida por camino de hormigón en dirección a la Ruta de los Molinos de Agua. Tras cruzar un puente colgante sobre la zona de “La Badina”, se enlaza con una senda rápida en ligero ascenso y una bajada hasta el punto de menor altitud de la prueba, donde da comienzo la primera subida seria para salvar en apenas tres kilómetros, unos 350 metros de desnivel. Desde lo más alto se divisan los pueblos vecinos de la comarca y el mar al fondo. Después de un kilómetro de senda y dos de pista forestal en llano, se encuentra el primer avituallamiento.
SECTOR 2. Mas de Miralles – Cruce de Colatxes (Km. 15,2).
Distancia: 6,8 kilómetros.
Una senda en ligero ascenso conduce al punto del Mas de Lliberato, desde donde parte una bajada bastante pronunciada de dos kilómetros muy rápida y con unas vistas espectaculares del pueblo de Llucena. Tras llanear con ligera pendiente y bordeando y cruzando varias veces el barranco de Casotes, por pista forestal de dos kilómetros de distancia, se alcanza al segundo de los avituallamientos.
SECTOR 3. Cruce de Colatxes – Mas de Mariques (Km. 22,5).
Distancia: 7,3 kilómetros.
Una subida corta pero intensa lleva al Mas de Campredo de dalt, donde se crestea para llegar al Campredo de baix y comenzar una bajada muy rápida y divertida hacia el barranco del Bosc. De nuevo empieza un ascenso que pasa por las masías de Mosqueras y fuente de Ensaia para alcanzar los 900 metros del Tossal de Mariques donde está ubicado el tercer avituallamiento. A partir de ese punto, las carreras se separan, y la Trailferradura33 coge otras sendas.
SECTOR 4. Mas de Mariques – La Foxenta (Km. 32,0).
Distancia: 9,5 kilómetros.
800 metros de pista forestal conducen hacia el antiguo camino de Adzaneta, senda muy rápida. Una vez en el Mas de Gozalbo, el recorrido se desvía para buscar una senda por el barranco del Fontanal. Tras un kilómetro de ascenso por pista forestal se llega al Mas de la Llometa, donde quedan restos de la antigua escuela republicana. Sólo queda un kilómetro más de zona muy técnica y con el firme muy irregular y roto para enlazar con la pista de les Torrocelles que lleva al avituallamiento de la Foxenta, centro de vida donde los corredores podrán dejar una bolsa con lo necesario.
SECTOR 5. La Foxenta – Mas del Polit – Lloma Saltadora (Km. 42,3).
Distancia: 10,3 kilómetros.
Tras dos kilómetros de pista forestal con ligero ascenso la prueba alcanza el Mas de Casanova situado a 1.000 msnm y desde donde se pueden contemplar unos rincones naturales de gran belleza. Una bajada muy pronunciada y técnica nos lleva a la base del rio Llucena, punto en el que comienza el plato fuerte de la carrera. En apenas seis kilómetros de senda con buen firme se salvan casi 900 metros de desnivel para alcanzar los 1.380 msnm. A los 4,5 kilómetros de ascenso se encuentra el avituallamiento del Mas de Polit donde coger fuerzas para el último tramo de subida hasta la Lloma Saltadora. Es el punto más alto de la carrera y merece la pena detenerse a contemplar el Penyagolosa y gran parte de las comarcas de la provincia con el mar al fondo.
TRAMO 6. Lloma Saltadora – Mas de Bernus (Km. 46,9)
Distancia: 4,6 kilómetros.
Tras un kilómetro en llano a casi 1.400 msnm., comienza el divertido y largo descenso donde perder toda la altura ganada pasando por La Fuente de la Canaleta hasta llegar al Mas de Bernus, punto en el que se ubica el avituallamiento.
TRAMO 7. Mas de Bernus – Naiximent del riu (Km. 50,1)
Distancia: 3,2 kilómetros.
El recorrido prosigue en continua bajada por sendas hasta el rio Llucena, pasando por el mirador de Peret y el Mas de la Fos. Una vez en el rio, se toma la pista que lo recorre hasta llegar a la zona lúdica del Nacimento del rio Llucena, donde espera el siguiente avituallamiento.
TRAMO 8 . Naiximent del riu – La Costa (Km. 57,1)
Distancia: 7,0 kilómetros.
Sexta y última subida larga importante. En apenas tres kilómetros se ganan unos 500 metros. Un kilómetro de pista dirige al inicio de la senda que, en fuerte subida, conduce hasta el Mas de Olaria, a 1.060 msnm, para llegar hasta la cantera del Mas de la Costa, donde se ubicó la meta de una etapa de la vuelta ciclista a España 2016. Es otro punto donde se puede disfrutar de unas vistas panorámicas impresionantes.
TRAMO 9. La Costa – Pont del Mas de Hilario (Km. 62,1)
Distancia: 4,9 kilómetros.
Saliendo del Mas de La Costa, se llanea durante dos kilómetros para tomar una senda muy técnica en bajada pronunciada por el barranco de La Mola, antiguo enclave ibero, que conduce hasta el último control en el puente del Toll de la Font.
TRAMO 10. Pont del Mas de Hilario –Meta en Llucena (Km. 65,5)
Distancia: 3,4 kilómetros.
Sólo quedan los últimos 3,4 kilómetros que se hacen bordeando el rio y recorriendo la Ruta de los Molinos de Agua, considerada ruta natural, para llegar a la base del pueblo. Tras una durísima aunque corta subida, se entra en las estrechas calles de Llucena para acometer los últimos metros hasta la meta final en la Plaza España.