“La mayor batalla mental de mi carrera”.
Medallista olímpico, campeón del mundo, 9b, 9b+… Erebor, King Capela, El Bon Combat, Perfecto Mundo… Es difícil poner en duda que Jakob Schubert es uno de los escaladores más destacados de su generación. El austríaco forma parte de ese reducido grupo selecto capaz de proyectar las vías más difíciles del mundo en inverosímiles paredes arqueadas donde nunca antes nadie salió victorioso en el persistente desafío a la gravedad.
Jakob empezó a escalar en 2003, cuando su padrino le convenció para que se inscribiera a un rocódromo de la zona, al ver el potencial atlético natural de Jakob. Aunque en un principio se sentía atraído por el fútbol, como otros muchos niños de la época, no tardó mucho en cambiar de enfoque y perfeccionar rápidamente su habilidad para la escalada.
En noviembre de 2007, con 17 años, Schubert debutó en la última y definitiva prueba de la Copa del Mundo de la IFSC en Kranj, Eslovenia. En esa prueba, terminó en un respetable 4º puesto, por detrás de consagrados escaladores como Cédric Lachat y Tomáš Mrázek -Patxi Usobiaga sería el vencedor final de la general en esa edición de la Copa del Mundo-. Dos años más tarde, Schubert se hacía con su primer triunfo en Copa del Mundo, con la victoria en la prueba de Brno en la República Checa. Y, a partir de ahí, 4 campeonatos del mundo de dificultad, 2 subcampeonatos, una tercera plaza, bronce en Tokyo 2020… Un palmarés de leyenda labrado en el plástico, pero que no puede ser entendido sin el tacto de la roca.
En el otoño de 2022, Schubert viaja a Noruega invitado por Adam Ondra para abordar juntos la que podría ser la vía más dura del mundo, Project Big. Una línea de una dificultad extrema en la Cueva de Hanshelleren, en Flatanger, equipada por el propio Ondra años atrás -y considerada por éste como más difícil que Silence (9c)-, que ninguno de los dos portentos de la escalada logró encadenar entonces por un estrecho margen.
Ondra intenta la ruta una vez más en la primavera siguiente antes del Campeonato del Mundo de Berna, pero sin éxito. Schubert, sin embargo, decide de antemano una táctica diferente: primero el Campeonato del Mundo y la clasificación olímpica en verano, y después el proyecto de roca. En septiembre de 2023, vuelve solo para un segundo intento. En esta ocasión, además, compartiendo sensaciones y proceso con todo el mundo a través de sesiones de streaming en directo.
El 20 de septiembre, tras más de 20 horas de lluvia incesante, Jakob se lanza a por su sexto intento en vivo. Apenas 20 minutos después, un exitoso crux tras unos buenos 85 agarres y un boulder final, el escalador de Innsbruck, de 32 años, grita sus emociones desde el alma mientras cuelga de la cuerda. El enigma quedaba descifrado.
*Streaming activo desde el minuto 04:13
