La historia de su denominación proviene de un grupo de montañeros locales que querían poner en valor diferentes rutas que partiendo del nivel del mar llevasen a la cumbre más alta de cada una de las islas para luego volver. La de Tenerife se llamó 0-4-0 que casualmente responde a las especiales características de su recorrido, ya que parte desde el nivel del mar para ascender hasta los casi 4.000 metros de altitud del Teide y regresar de nuevo al punto de partida.
Tras un período de rehabilitación, la Ruta 040 ha quedado inaugurada. Con una longitud total cercana a los 27,8 kilómetros hasta el pico del Teide, transcurre principalmente por el municipio de Los Realejos, aunque también se adentra en el de La Orotava. Durante su trazado recorre los espacios naturales del Paisaje Protegido de Los Campeches, Tigaiga y Ruiz, el Parque de la Corona Forestal y el Parque Nacional del Teide, para regresar de nuevo, en un recorrido inverso, hasta la costa. Y todo ello atravesando un mundo de contrastes que te permite pisar la arena de la playa, atravesar bosques, caminar o correr por arena volcánica como si de un paisaje lunar se tratase y afrontar el ascenso final entre rocas de gran tamaño y algo más de tecnicidad. Se trata sin duda de un paraíso para todos los amantes del deporte outdoor y concretamente del correr por la montaña. Y según nos cuenta Azara García de los Salmones en esta charla, es toda una experiencia.