A la montaña vamos a disfrutar, ya sea de una manera pausada y contemplativa, o tratando de exprimir nuestros cuerpos en busca de una preparación óptima para rendir en competición o simplemente porque nos gusta progresar rápido. Y para disfrutar, además de un buen equipo que nos aporte seguridad, es necesario mantenernos secos y cálidos, más cuando las condiciones en muchos casos pueden ser complicadas en términos de frío, lluvia, nieve o viento. Protegernos del exterior, evacuar nuestro sudor y retener el calor corporal son clave para realizar una actividad satisfactoria. Y para ello, desde hace ya bastante tiempo, se habla del sistema de capas en lo relativo a las prendas que vestimos en la montaña.