El macizo de Montserrat la vio nacer y crecer como deportista, y es aquí donde descubrió el mundo de la montaña, pasión que le supieron transmitir sus padres desde muy pequeña.
Cavalls del Vent 2012 marcó el punto de inflexión más importante en su trayectoria deportiva. “Fue la esencia de la supervivencia, del compañerismo, de la competición, de poner el cuerpo realmente al límite donde jamás había estado en una carrera de larga distancia. Aunque pasen los años, pienso en ese día prácticamente a diario”. La victoria en esa edición cargada de épica y tragedia, junto a la conseguida en UTMB en 2017, están consideradas por la atleta catalana como las victorias más importantes de su carrera, por delante de otros resultados excepcionales como su Campeonato del Mundo de Ultra Trail, Ultra Trail World Tour, Transgrancanaria, Camí de Cavalls, Diagonale des Fous…
Una lesión provocada por un grave accidente de escalada marcó en parte su carrera. Los médicos le dijeron que no podría volver a correr, pero su tesón, su determinación y su fortaleza mental -la mente es el motor del éxito, defiende- le llevaron a darle la vuelta a la situación y a volar por los interminables senderos de las pruebas más relevantes del panorama internacional.
En agosto de 2014, tras un año duro de competiciones y haber subido a lo más alto del podio en numerosas ocasiones, pone su cronómetro en marcha en la legendaria plaza de la iglesia de Chamonix con el objetivo de sumar esa esperada primera posición en la meca del trail, en la carrera que aglutina todos los adjetivos superlativos de este deporte. Este vídeo nos desvela los entresijos de esa edición y todo aquello que impulsa a una atleta fuera de lo común. Un icono del mundo del trail fiel a sus principios.
“Los primeros 70 kilómetros los corres con tus piernas, el resto con tu cabeza”.
