Ramón es dos veces campeón del mundo. Tres veces campeón de Europa. 7 veces campeón del Rock Master de Arco. Cuenta con más de una veintena de oros en pruebas de la Copa del Mundo IFSC. Y más de una treintena de encadenes por encima del noveno grado.
Empezó a competir como internacional en 2001, en una prueba de Copa del Mundo celebrada en la cuna del alpinismo, en la localidad francesa de Chamonix. En pocos años había ganado todo lo que se podía ganar a la par que liberaba y encadenaba las vías más duras del planeta. En 2003, realizó la primera ascensión de la mítica “La Rambla” 9a+, probablemente una de las vías más duras y emblemáticas de la época. Poco después Ramonet ganaba campeonatos del mundo y se anotaba encadenes del calibre de Nit de Bruixes, Era Vella, Pachamama y Biographie. Ramón Julián ha sido, y es aún superados los 40, uno de los escaladores más fuertes y disciplinados del mundo.
Verlo escalar te llena de fuerza y de aplomo. No duda, no tiembla. Simplemente va. Hace el paso. Chapa. Respira. Mira. Pura meditación.
Ligero, fuerte, concentrado.
En 2009, Barcelona acogió la final de la Copa del Mundo de Escalada de la IFSC y aunque Ramonet se llevó la plata en esta ocasión este sigue siendo un pegue inhumano con un final de infarto en el que siente todo el calor del público.
Leyenda viva. Él es Ramón Julián. Campeón de campeones cuando la escalada aun no era mainstream.
