Simond ya estaba en las expediciones que marcaron los inicios del alpinismo. Esta marca ha acompañado a los pioneros durante las primeras ascensiones a montañas como el Everest o el Annapurna. De hecho, Herzog y Lachenal ya contaban con ella cuando el ser humano alcanzó por primera vez la cumbre de un ochomil -el Annapurna- en 1950. También estuvo en la primera ascensión al Everest en 1953 por parte de Hillary y Norgay, o en la de la cara oeste del K2 en 1991 por Profit y Beghin. Hoy en día, su material es desarrollado y probado en la montaña por los escaladores más exigentes, entre los que están los formadores de los futuros guías de montaña de la Escuela Nacional Francesa de Esquí y Montañismo (ENSA). Pasado, presente y futuro de la marca especializada en escalada y alpinismo de Decathlon.
Los inicios de SIMOND fueron muy anteriores a las fechas a las que hacemos referencia en el párrafo anterior. Sus orígenes se remontan a la década de 1820. Los hermanos Simond ya trabajaban con el hierro y la madera en el valle de Chamonix. Los primeros exploradores recurrían a ellos para que les fabricasen herramientas con las que progresar en sus actividades.
Pero este artículo no versa sobre la historia de esta marca, sino sobre uno de esos productos que la firma francesa ha desarrollado para actividades de alpinismo invernal que sorprenden por sus prestaciones: los pantalones para alpinismo ICE. Está claro que saben lo que hacen.