"Ella estaba sentada allí esperando a morir. No tenía destreza, ni equilibrio. Es una situación extremadamente peligrosa. Es probablemente una de las situaciones más peligrosas de la Tierra".
Al alcanzar la cumbre del Shisha Pangma el 18 de septiembre de 1987, el polaco Jerzy Kukuczka se convirtió en el segundo hombre en escalar los catorce picos de más de 8.000 metros de la Tierra, escasos meses después de que lo hiciera Reinhold Messner.
El día 27 de mayo del 2022, un equipo de escaladores y fotógrafos alcanza la cima del mundo con el objetivo no ya sólo de hacer cumbre, sino de intentar hacer sobrevolar un dron por encima de la pirámide más alta de la Tierra.
“Creo que actualmente escalar una montaña de 8.000 metros por una vía normal es como hacer un trekking de altura porque está todo preparado. No hay más que ahondar en los datos. En el Annapurna, hasta 2010, éramos menos de 300 los que habíamos hecho
Messner y Habeler dejaron el Collado Sur situado a casi 8.000 metros y enfilaron con determinación el camino a la cima ascendida por primera vez, con oxígeno, 25 años atrás. Las condiciones de la montaña y la altitud les obligaban a descansar cada 40 pasos.
En 1990, Féilx y Alberto Iñurrategi partieron por primera vez hacia el Himalaya. Aquel sueño se llamaba Pumori. A ese sueño le sucedieron los del Makalu, Everest, K2, Cho Oyu, Lhotse, Kanchenjunga, Shisha Pangma, Broad Peak, Dhaulagiri y Nanga Parbat. En el verano del 2000
Una mirada poco frecuente acerca de la vida en el Everest y de aquellos que han hecho posible la peregrinación a uno de los templos más notables de la Tierra. Una aproximación desde dentro a un problema mayor que afecta a todos los implicados.
En 1975, la mayor, mejor equipada y más experimentada expedición británica al Himalaya tenía como objetivo alcanzar la cumbre del Everest por la vía más dura y difícil: la cara suroeste, entonces no escalda y donde 5 expediciones anteriores habían fracasado.
¿Qué impulsó a los hombres que arriesgaron y perdieron sus vidas para conquistar la montaña más alta del mundo? Cincuenta años después, Penny Mallory, cuyo antepasado, George Leigh Mallory, perdió la vida en la montaña, cuenta la historia de esta extraordinaria aventura, emprendida con
“Sé que es posible escalar el Everest con oxígeno, pero nadie sabe si es posible hacerlo sin él”. En 1978, Reinhold Messner había sorprendido al mundo entero al ser el primer alpinista que coronaba un 8.000 sin oxígeno. Cuando sobrevoló la cima más alta del
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