Tenía el sueño de escalar las cimas más altas del planeta y no dudó en apuntarse a expediciones comerciales que formaron parte de su aprendizaje y evolución inicial. En 2019, su nombre comenzó a sonar dentro del mundo del alpinismo al hacerse con la difícil
Dejó una marca indeleble en el alpinismo con su estilo audaz y sus conquistas aparentemente imposibles. Su destreza técnica y su voluntad inquebrantable le llevaron a enfrentar algunas de las paredes más peligrosas y desafiantes del mundo, ganándose el respeto y admiración de sus pares.
Al alcanzar la cumbre del Shisha Pangma el 18 de septiembre de 1987, el polaco Jerzy Kukuczka se convirtió en el segundo hombre en escalar los catorce picos de más de 8.000 metros de la Tierra, escasos meses después de que lo hiciera Reinhold Messner.
“Primero salgo yo. A continuación Ali y Tamara. Simone es el último. El aire que entra en los pulmones es como si estuviera formado por alfileres. Voy marcando mi ritmo mientras hago cálculos matemáticos para saber que mi mente funciona bien. A 8.000 metros esto
En 1990, Féilx y Alberto Iñurrategi partieron por primera vez hacia el Himalaya. Aquel sueño se llamaba Pumori. A ese sueño le sucedieron los del Makalu, Everest, K2, Cho Oyu, Lhotse, Kanchenjunga, Shisha Pangma, Broad Peak, Dhaulagiri y Nanga Parbat. En el verano del 2000
El intento final para la cumbre fue dramático: Buhl continuó solo durante los últimos 1.300 metros después de que sus compañeros se volvieran. Bajo la influencia de drogas estimulantes, llegó a la cumbre peligrosamente tarde.
“Sé que es posible escalar el Everest con oxígeno, pero nadie sabe si es posible hacerlo sin él”. En 1978, Reinhold Messner había sorprendido al mundo entero al ser el primer alpinista que coronaba un 8.000 sin oxígeno. Cuando sobrevoló la cima más alta del
Tras 64 días, Simone More cae enfermo y David Göttler une fuerzas con el polaco Tomasz Mackiewicz para llegar a la cima, pero la montaña, una vez más, muestra su cara más dura. El Nanga Parbat y sus 8.125 metros, testigos de innumerables intentos
“Llegué a llamar a casa para despedirme de mi padre. Cuando conseguí llegar abajo, después de tres días, me puse a llorar y pensé que nunca me había ocurrido eso. En el Nanga me pasó por segunda vez. Estaba grabando un pequeño vídeo en la
© Copyright Kissthemountain 2020 | Bajo la atenta mirada de las caras norte de Sierra Nevada | Granada. Spain - Términos del servicio | Privacidad | Política de Cookies
info@kissthemountain.com
