“Sabía que iba a ser un proceso largo y difícil, no solamente por la dificultad de la vía sino por la meteorología de la zona. Una vez estando aquí, me di cuenta de que era más complicado de lo que pensaba. Al ser cara sur, el calor y la humedad son bastante elevados y el estilo tremendamente exigente, de canto muy pequeño”.
El escalador Beat Kammerlander abrió este multpich en 1997 como homenaje a Wolgfang Güllich. Adam Ondra realizo la liberación en 2008. Y unos 8 años más tarde, en 2016, Edu Marín firmó la primera repetición de esta obra maestra de alta dificultad situada en Ratikön, Suiza.